Históricamente, en las organizaciones con ambición de innovar era (y sigue siendo) un error muy común descansar todo el trabajo creativo en manos de sus empleados. En este sentido, la innovación abierta es una alternativa al proceso de innovación convencional. En el caso de la innovación abierta, la información no tiene que permanecer dentro de unos límites preestablecidos, pasando a ser una forma de pensar, una nueva mentalidad, estando abierto a compartir y recibir información de manera constante siempre en el beneficio del futuro de la organización.
La disrupción es una nueva forma de pensar, que introduce nuevas interacciones y subvierte las lógicas actuales. Pero también es una interpretación diferente de la realidad, donde lo que antes no existía surge de una reubicación de elementos y dinámicas preexistentes. Así, la disrupción podría describirse como romper con viejos patrones o separar partes de un sistema para combinarlas entre sí y usarlas de manera diferente. En este sentido, se trata de una concepción abierta de la realidad.